lunes, 29 de octubre de 2012

EL ESTADO FRENTE A LA EDUCACIÓN


El ESTADO FRENTE A LA EDUCACIÓN

Educación para todos Vs. Educación de Calidad:

La educación llegó a la naciente nación colombiana como un mecanismo para organizar al pueblo bajo unas ordenes y para mantener el diálogo vertical “por varias razones: primera, para que la estructura económica del estado funcione es necesario que los miembros de la sociedad sean productivos. Para que sean productivos es fundamental que sean capaces de manejar algunas de las nociones básicas de la vida científica. Sin embargo, hay un cambio radical entre los sistemas de educación de la colonia y los sistemas propios de los estados-nación. Durante la colonia, el sistema educativo en Latinoamérica, si bien había creado instituciones universitarias muy importantes que generaron un complejo panorama de conocimiento, estaban dirigidas para educar a la sociedad letrada, es decir, para un grupo muy selecto de personas” (González. Contextos Políticos y Culturales en Latinoamérica).

También surge la Escuela como “un medio de controlar a la gente, contar ganancias y recordar deudas”. La economía industrial necesitaba obreros instruidos. Los pobres tenían que aprender a escribir, leer y calcular. Se extendió la cultura dominante y colonizadora. Doctores, licenciados e ingenieros forman la nueva casta intelectual. Ocuparán puestos de mando al servicio de los ricos. Manejan nuevas jergas de su oficio. Unos pocos se comprometen con su pueblo, pero siguen hablando como los de arriba: ‘con corrección, buena sintaxis…como gente culta’.  Obreros y empleados: tienen algún diploma y poca instrucción. Tienen ‘menos cultura’. La gran masa: marginada de la cultura. No tiene cultura. Imita los modales de los de arriba”. (El Lenguaje Popular. Aler).

Iglesia y educación:

La educación en la Colonia estuvo regentada por el Clero. Así había sido entendido el mandato del Señor Jesús: “Vayan por todo el mundo y enseñen…” (Mateo 28). Era una manera para Evangelizar y mostrar el testimonio de Vida y la Salvación de Jesús de Nazareth. De esta forma la Iglesia, también, hizo un medio para promover los valores y la moral de los pueblos. La educación en todos los niveles siempre ha sido, para la Familia de Dios en la tierra, una gracia y un gran desafío.

Por eso hemos encontrado centenares de escuelas a la orillas de los ríos, en las orillas de las carreteras, en un claroscuro de la selva, en lo más alto de la montaña y como maestras unas humildes religiosas que hacen el papel de maestras. De hecho, un modelo que ha dado mucho fruto es el de “las Normales” o “Escuelas Normales Superiores” que nacen alrededor de las comunidades religiosas, con el fin de formar a las nuevas maestras, que en un momento se caracterizaban porque solo iban dirigidas a las “niñas” o “señoritas” y últimamente en el lenguaje incluyente, también los varones tienen lugar y derecho.

“Hasta el sol de hoy” la Iglesia sigue siendo garante de la educación de excelente calidad, en algunas circunstancias con establecimientos en medio de los estratos altos de la sociedad, pero la mayoría de las veces, en medio de los grupos humanos más pobres y en vía de desarrollo.

Estado y Educación:

Como bien lo afirma, González en  Contextos Políticos y Educativos para América Latina, en Colombia se dio primero la burguesía que el Estado. Empieza en el país la división de clases: la clase alta en las grandes ciudades, quienes tenían todas las facilidades para ingresar al sector educativo: cercanía, recursos económicos, tradición familiar: algunos padres de familia tenían algún nivel de instrucción cultural; linaje político, social o económico.

A estas personas había que formarlas para poder orientar los destinos de sus pueblos y organizaciones empresariales. Aunque paradójicamente, quienes crearon las grandes empresas en Colombia, no fueron los eminentes egresados de las universidades del extranjero, sino hombres y mujeres con mucha visión y talento. Ya luego viene la formación de los administradores de empresas y demás profesiones.

Pero con motivo de la Revolución Industrial es preciso educar a los obreros, quienes debían manejar las máquinas y los equipos relacionados. Surgen talleres de artes y oficios. Se crea el Sena y similares. Luego a finales del Siglo XX se promueve la Educación para el Empleo, o programas técnicos, así como los tecnológicos. De esta manera más y más colombianos acceden a la educación. Y a una educación con dos tonos: masiva y universal: alcanzando a todos y sin exclusión. Llegando incluso hasta las cárceles y centros de rehabilitación y por diferentes medios: radio, televisión, impresos, Internet…hasta por el correo postal. Colombia ha sido líder en la masificación y universalización del sistema educativo.

Campañas masivas de alfabetización para adultos, formación continua, jornadas extra, escuelas de padres, bibliotecas populares, “biblioburros” o “Bibliocircos” como experiencias innovadoras…y llegar hasta la etnoeducación. El otro tono: es el de la calidad: si bien en los establecimientos construidos y  administrados por los gobiernos nacional, regional o local, con recursos propios o por medio de cogestión (por ejemplo con el Comité Nacional de Cafeteros), requieren mantenimiento constantemente: pinturas, servicios sanitarios, agua potable, tableros, paredes, fachadas, ventanas, techos y todo esto en optimas condiciones, para favorecer el proceso de enseñanza y aprendizaje, es fundamental que el Estado también favorezca la calidad humana: formación de docentes: en Medellín, por ejemplo, se encuentra La Escuela del Maestro “como un espacio para la innovación educativa y el desarrollo profesional e intelectual de la educación, la promoción y el desarrollo de innovaciones educativas que posibiliten la transformación de los ambientes educativos y con ello mejorar la calidad de aprendizaje de los estudiantes”  

El acceso a los estudiantes a las nuevas Tecnologías para la Información y el Conocimiento. Bibliotecas ambientales y espacios lúdicos, posibilidades de salidas pedagógicas, trabajos de campo. Educación basada en proyectos, en problemas, en investigación.

La educación en Colombia ha cambiado en estos últimos años, pero el Estado también tiene que seguir mirando el eje educativo “como la niña de sus ojos”, para que Colombia siga siendo la mejor esquina de América: justa, pacífica, educada, pujante y en armonía con la naturaleza”.

Algunos docentes entrevistados han dicho lo siguiente:

“Se fusionaron los centros educativos. La escuela ha pasado a ser abierta a la comunidad. La comunidad se ha vinculado más con los procesos de la escuela. Las escuelas, incluso las rurales, han cambiado en la tecnología, con Medellín Digital, se ha favorecido la comunicación y la investigación.

Por medio del Presupuesto Participativo hay un cambio donde hay más intervención de la comunidad y del mismo Estado. Lo que es infraestructura y materiales de la escuela se han generado a través de estas estrategias: Presupuesto Participativo y Canastas Educativas.

Los padres de familia han participado más, han tenido más sentido de pertenencia, mayor apropiación en cuanto a infraestructura. Falta mayor acompañamiento en la educación dentro de la familia. Descargan todo el proceso de aprendizaje en la escuela. La docente es la responsable de que el niño aprenda o no aprenda. Ya no hay familias nucleares completas, sino monoparental o mixta y eso afecta el proceso pedagógico en los estudiantes.    Se encuentran papás represivos o analfabetas que tampoco favorecen el proceso.

Con Presupuesto Participativo se ha visto más integración de la comunidad y del mismo Estado. Así mismo el programa: Canasta Educativa.

La infraestructura, ha cambiado, pero se sigue la lucha, porque es algo lento.

La metodología ahora es más desde la experiencia significativa, desde el quehacer: el ser, el saber y el hacer. Las docentes son muy abiertas a la comunidad y a la creatividad. Antes la docente era de tiza y tablero, planas y libros.

El apoyo del Estado ha sido mayor: mayor vinculación con Secretaría de Educación, el Presupuesto Participativo, visitas, capacitaciones y el Restaurante Escolar.

La Escuela del Maestro, con diferentes cursos gratuitos de acuerdo a los intereses de cada maestro, aunque estas capacitaciones ahora no son escalafonables por el Decreto 1278 que no da mucha ventaja, pero no se paga por el aprendizaje. Todo esto se da siempre y cuando uno manifieste sus necesidades. Hemos hecho todo el proceso de formación en Tics, las compañeras en Inglés y demás.”

Estela Pareja:

“Ha cambiado la infraestuctura, el comportamiento de los estudiantes y los padres de familia. 

Ha mejorado mucho la relación con el Estado. Ya hay más aprecio por el trabajo del educador. 

La familia educativa se vive de diferentes maneras y cada uno aporta para ello. Las experiencias significativas: la forma de uno llegar a los estudiantes, la forma de los estudiantes expresarse, practicar, cumplir con sus tareas, trabajos, actividades”

Margarita Gutiérrez:

“Ha habido un cambio fundamental en la actitud y las prácticas pedagógicas de los docentes. Primero se creía que la misión era llegar al aula y transmitir al estudiante como una “tabla rasa”. Ahora se piensa y se concibe un proceso más interactivo, un compartir de saberes pedagógicos entre docente, los estudiantes y toda la comunidad educativa. Entre todos se hace una construcción de ese saber.

Pienso que hay un aspecto que es fundamental y necesario: que la gente se haga conciencia de él y se apropie de la gratuidad de la educación pública. En estos momentos en la educación pública nadie paga un peso. Debe seguir siendo así. Tenemos que seguir siendo conscientes tanto docentes como comunidad educativa de este derecho.

Toda experiencia y aprendizaje debe servir para la vida y dejar huella. El aprendizaje significativo tiene que ver con la vida, con la vivencia con el otro ser humano, con el hermano que tenemos a nuestro alrededor, con el ser feliz, con edificarnos cada día más…”

Ignacio Lopera:

Hay unos niveles de profesionalización que en otrora. Una escuela donde ingresan maestros y maestras más comprometidos con su labor, gente con una vocación más humana  y esto es muy importante, porque había una escuela muy congelada, muy quieta, porque no había maestros que gozaran de su oficio, que le encontraran nuevas alternativas a la escuela, volviéndola vida, abierta al mundo, muy relaciona con la cotidianidad y donde los niños se sintieran alegres yendo a la escuela. Hoy hay una nueva mirada del maestro.

Hoy tenemos escuelas mucho más dotadas, mucha mayor inversión, aunque no lo requerido. Tenemos muchas falencias en la ruralidad hoy sigue siendo invisible, no llegan buenos recursos para los niños y las niñas del campo. Es ahí donde necesitamos mayor presencia del Estado allegando recursos renovando la educación rural para que los niños pasen de las aquellas viejas cartillas de tanto uso a materiales más diversos, donde los computadores estén y sean usados para conectar las veredas con el mundo y abrir el conocimiento de otras formas.

La educación rural frente a la globalización: la globalización impone nuevas miradas porque esto puede poner en riesgo la identidad misma del territorio. Es inevitable la globalización: el mundo se está interconectando cada vez más veloz y nosotros no podemos abstraernos a esto, en esa misma medida tenemos que tener mucha conciencia a la hora de la formación para no olvidar que hay una identidad, que hay unos conocimientos que nos pertenecen propios de nuestra cultura y que se pueden diluir si nos sumergimos de manera inconsciente en estos nuevos mercados. Es inevitable pero debemos afianzar mucho el valor de la identidad del territorio de nuestros estudiantes.

Carmenza Cáceres:
Tenemos que entender el contexto para hablar de la educación. Tenemos que hablar de la legislación vigente y que ellas van cambiando en la medida que ellas van cambiando en la medida de las necesidades de cada una de las entidades específicamente.

Anteriormente la educación era concebida como un proceso de transferencia de conocimientos solamente, de mirar en un proceso vertical donde arriba están los docentes y abajo los estudiantes. El conocimiento se generaba desde el profesor y él era el que tenía los conocimientos y no más. Ahora la educación es un proceso más lineal y recíproco, donde el estudiante forma parte activa en la construcción del conocimiento. El proceso ahora está mediado por las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones en la medida en que se una demanda a nivel social. En las Instituciones de Educación Superior, por ejemplo, se debe trabajar mucho con relación a eso que es la demanda del medio; entonces ahora la educación está mediada por la innovación, investigación, nuevas tecnologías. Anteriormente no se daba mucho eso, se trabajaba más en un proceso donde había un receptor y un transmisor de conocimientos y se paraba allí. Ahora se permite una construcción del aprendizaje por parte de todas las personas que participan en toda la conformación del trabajo en el aula de clase.

¿Y el gobierno qué hace? Genera unas políticas que permiten a cada uno de los establecimientos educativos apropiarlas para buscar la calidad. Ahorita se trabaja con Planes de Mejoramiento donde cada Institución lo que hace es armar una propuesta de trabajo donde se operacionalizan unas metas y unas estrategias y luchan todo el año por conseguirlas, las montan en un plan operativo y tratan de darle viabilidad a esos elementos pertinentes para mejorar desde la gestión: académica, administrativa, financiera, la atención a la comunidad. Esos lineamientos se dan desde el Ministerio para que se dé mejor calidad a la educación del país.

María Eugenia:
Con la llegada de los profesionales, con el cambio del decreto 2277 al 1278 la educación es más técnica, aunque la Ley habla de lo integral se ha olvidado la parte integral de los estudiantes. Se piensa más en el logro académico que en el desarrollo, en lo ético, en los valores…el muchacho responde o responde. En ese sentido ha cambiado mucho. El decreto 230 del 2001 le hizo mucho daño a la educación donde los muchachos eran promovidos hasta con tres asignaturas perdidas, eso generó en los muchachos una pereza mental. Aunque ya aparece un nuevo decreto en el 2010, el 1290 y las instituciones lo debían ajustar, éstas hicieron de éste casi de nuevo en un 230, lo que mantiene desorientados a los padres como a los estudiantes, porque siendo instituciones públicas, algunas son muy exigentes y otras no. Entonces cuando un muchacho se mueve de un lugar a otro no sabe qué pasar y aunque hay unos parámetros nacionales, al interior de la cada institución es muy diferente.

Siento que se ha deshumanizado mucho la educación. Se le ha apuntado mucho a los conocimientos específicos, pero falta entender al muchacho como un ser que tiene diferentes formas de aprender y hay situaciones que realmente tiene que ver mucho con el quehacer docente, con esa parte de pedagogía que nos enseñaban en las universidades y cuando llegan los profesionales que manejan muy bien el saber específico, pero que de pedagogía muy poquito. Llegan a enseñar como les enseñó el profesor más duro de la universidad y eso en los muchachos adolescentes es muy traumático, entonces pasamos del 230 totalmente alcahueta al 1290 donde queremos rajar a todos los muchachos. Tenemos que revisar eso con lupa y volver a repensar ese cuento de la educación.

Bienvenidos todos los profesionales, pero tienen que meterse en el cuento. Ellos  no quieren saber de estas metodologías, porque dicen que todo esto está en el papel, pero realmente los muchachos necesitan que el conocimiento se les baje al nivel de los estudiantes, es entender que cuando a los muchachos se les trabaja desde el contexto ellos pueden interiorizar más los conocimientos, pero esto realmente genera más trabajo para planear las actividades con los muchachos. Cuando uno piensa en un problema no es únicamente el problema que trae el libro, hay que pensar en el contexto, en los temas que quiere abordar y entonces eso genera ciertas dificultades y lamentablemente la mayoría de los docentes seguimos un texto guía olvidándose mucho del contexto y trabajando más el texto guía. Eso lo proporcionan mucho las situaciones-problema cuando se puede tener en cuenta el trabajo colaborativo dentro del grupo y a partir de ahí establecer metodologías de aprendizaje, conocer más al estudiante. Pero seguimos enseñando clase magistral con tizas y tableros y ejercicios de el libro totalmente descontextualizados donde todavía hablamos que 1 Kilo de papas vale $20 que no tiene nada que ver con lo que nos movemos. Muy bonita la teoría, pero no la estamos llevando al aula.

El Estado arranca con la Ley 115 y a partir de ahí aparecen con una cantidad de decretos que la reglamentan. En estos momentos –desde hace un año- se habla de “educación gratuita”, pero vuelve y es de nuevo un engaño meter en un salón 50 muchachos y hablarles de “educación gratuita” con calidad eso es un engaño, porque el hacinamiento en que están los muchachos: 20 computadores para 50 estudiantes entonces se queda uno con el interrogante si la educación es gratuita. Ellos han invertido y no se puede negar, pero la realidad de las aulas es diferente, porque un colegio con 2000 estudiantes cuenta tres salas de informática, cuántos computadores por estudiante. Y nos hablan que debemos trabajar las tics en el aula. Ahora nos hablan de mandar a los colegios tableros digitales y nos dan capacitación y han mejorado un poquito en eso cuento de la capacitación, pero cuando llegan los tableros siguen siendo insuficientes para lo que ellos pretenden mostrar.

También está el sueldo de los docentes, quienes siguen siendo los profesionales menos pagados en el país. Los docentes están seis horas de clase en la institución, pero tiene que salir a ajustar el sueldo en otras instituciones, a complementarlo. Si mejoraran los salarios los docentes podrían dedicarse a la investigación y a mejorar las prácticas pedagógicas dentro del aula. El 1278 es un decreto nocivo donde el ascender y mejorar las condiciones salariales sigue siendo un juego de azar.





No hay comentarios:

Publicar un comentario